El dolor de cuello es un malestar frecuente y se origina por exceso de estrés, cansancio, mala postura, o en el peor de los casos, por artrosis.
Los especialistas de Mayo Clinic destacan que en raras ocasiones este puede ser un síntoma preocupante. Sin embargo, es importante que acudas a un médico si el malestar de cuello está acompañado de entumecimiento, dolor punzante y pérdida de fuerza en las manos.
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Las compresas calientes ayudan a que tu circulación sanguínea se mantenga a buen ritmo y permiten que los músculos se aflojen con facilidad.
Este método casero es económico, popular, y además, los especialistas de Mayo Clinic lo consideran una de las técnicas más fáciles para tratar el dolor de cuello y reducir la inflamación. Por si fuera poco, es de fácil acceso y alivia el malestar en pocas horas, ¿pero cuál es la forma correcta de hacerlo?
Modo de aplicación: En la zona afectada coloca por 20 minutos varias veces al día una bolsa de hielo envuelto en una toalla. Alterna entre frío y calor, toma una ducha con agua caliente para relajar los músculos y usa una almohada térmica. Al rato deberías sentirte un poco mejor del dolor de cuello.
Cuando haya disminuido el dolor de cuello causado por estrés u otras razones, realiza ejercicios suaves de estiramientos. Trata de ejecutarlos diariamente, especialmente si tienes una carga pesada laboral.
Esta es la forma indicada de hacerlo: calienta el cuello y espalda con una almohada térmica. Si en casa no tienes este recurso, regálate una ducha caliente. Posteriormente, siéntate en la cama o en una esterilla e inclínate suavemente de lado a lado, luego gira el cuello de derecha a izquierda con suavidad y paciencia.
Una vez que hayas pasado las dos primeras sugerencias, lo más recomendable es recibir un masaje anti-estrés, preferiblemente con un médico capacitado.
En caso de que no tengas opción y quieras eliminar el dolor de cuello desde casa, recomienda que se mojen los dedos con crema hidratante o aceite antes de hacer los movimientos circulares.
Por otro lado, entre las medidas de cuidado personal figura el consumo de analgésicos para aliviar y quitar el dolor de cuello. Tal es el caso del Ibuprofeno, Paracetamol y Naproxeno, indica Mayo Clinic en su página web.
Recuerda consultar con tu médico si puedes tomarlas y cuál es la dosis correcta, evita auto medicarte por tu cuenta.
Acupuntura y quiropraxia
Si requieres de algo más contundente que compresas intenta con algunas sesiones de acupuntura con un médico certificado en agujas estériles. Esta opción, al igual que la quiropraxia, son unas de las soluciones que te ofrece la medicina alternativa para controlar el dolor de cuello.
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