Los exfoliantes caseros para los pies son una solución sencilla, económica y natural que mejora la apariencia de los talones agrietados y mantiene la suavidad de la piel. Tomando en cuenta que se trata de una de una de las partes más sensibles y que deseamos mantener cuidadas en todo momento, te dejamos algunos remedios naturales que remueven la piel muerta, para lograr la humectación que se ha perdido.
Exfoliantes caseros para pies con miel y arroz
Licua ¾ de taza de arroz hasta obtener granos finos y mezcla junto a 3 cucharas de miel. Posteriormente distribuye la pasta en los pies y talones realizando movimientos en círculos. Espera 15 minutos y retira con agua tibia o incluso agua de arroz. Ambos ingredientes además de hidratar, ayudan a relajar los pies.
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Exfoliantes para pies, con aloe y bicarbonato
Necesitas 5 cucharas de gel de aloe vera y 2 de bicarbonato de sodio. Mezcla las dos partes hasta que se incorporen por completo. Seguidamente aplica la mezcla sobre los pies limpios y realiza suaves masajes, esperando 10 minutos antes de retirar por completo con abundante agua. Verás que el dolor de los talones agrietados mejora casi de inmediato con este exfoliante para pies.
Aceite de oliva y sales de epsom
Con este exfoliante para pies además de recuperar la suavidad, puedes ayudar con el dolor y mal olor. En un recipiente incorpora 4 cucharadas de sales de epsom y agrega poco a poco el aceite de oliva hasta formar un exfoliante. Coloca la mezcla después del baño, realizando movimientos ascendentes en los pies; finalmente enjuaga con agua tibia.
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