La piel es uno de los aspectos que más se cuidan las mujeres, por eso, cuando luce opaca y reseca lo más adecuado es buscar alternativas favorecedoras que ayuden a nutrir e hidratar la piel. Aunque la primera opción puede ser una crema hidratante, también es válido voltear la mirada hacia ingredientes naturales, específicamente en el huevo.
Este alimento es sumamente popular y eso es lo mejor de todo, no hay necesidad de salir de casa o invertir en productos costosos para comenzar a cuidar, nutrir e hidratar la piel.
¿Por qué es bueno usar huevo? Este ingrediente posee altas dosis de proteína. Por lo tanto, es muy usado en la cocina para elaborar postres o acompañar comidas pero también es utilizado en el cuidado personal para mejorar, nutrir e hidratar la piel y el cabello.
Con la clara de huevo puedes eliminar las impurezas de la piel y conseguir un cutis más terso y tonificado. Además, no tienes que gastar grandes cantidades de dinero, lo más probable es que solo tengas que ir a buscar el ingrediente en la cocina.
Bate la clara de huevo a punto de nieve y, con esa preparación, cubre todo el rostro. Después de eso, espera durante unos 20 minutos o hasta que esté seco en la piel y retira con agua tibia. También puedes usar una infusión de manzanilla para eliminar el producto casero.
Antes de aplicarte toneladas de corrector de ojeras, lo más importante es trabajar esa zona para mejorar la aparición de bolsas. Coloca una capa fina de clara de huevo sobre el área afectada durante un tiempo aproximado de 10 minutos.
Si quieres potenciar el efecto de la clara de huevo, puedes incorporar un poco de leche en la mezcla y así convertir el tratamiento casero en una solución más poderosa.
El exceso de grasa es un inconveniente de belleza que nadie quiere en su rostro, por eso, puedes usar este ingrediente como aliado para limpiar profundamente los poros y nutrir e hidratar la piel.
Realiza una mascarilla casera combinando la clara de un huevo con tres cucharadas de avena y aplica esa mezcla sobre la cara. Espera unos 15 minutos y retira con abundante agua.
Si lo que quieres es humectar alguna zona del cuerpo con signos de resequedad, puedes utilizar la yema de huevo. El efecto se da gracias a las vitaminas y los ácidos grasos que tiene el alimento.
Todo lo que tienes que hacer es mezclar una yema de huevo con el zumo de un limón y una cucharada de aceite de oliva.
Tip adicional: mantén presente que la clara de huevo se debe usar en las zonas grasosas mientras que la yema es para humectar las áreas secas.
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