Al momento de maquillarte, elegir la forma de tus cejas y hacer contouring, hay una técnica que puede ayudarte a darle armonía a tus facciones: el visagismo.
El visagismo consiste en analizar cada parte de tu rostro para que se perciba balanceado a la vista. La base del visagismo es la forma del rostro, pues con él vas a saber si es ovalado, redondo, en forma de corazón, cuadrado. Cada uno de estos tipos de rostro tiene formas de maquillaje y contouring especiales, en las que se usan colores claros para resaltar y oscuros para atenuar.
Por ejemplo, si tu frente es amplia, puedes aplicar sombras oscuras en los bordes para crear la ilusión de que es más pequeña. Oscurecer un poco tus pómulos o marcarlos te ayuda a que tus mejillas se vean más delgadas. Igual pasa que puedes perfilar tu nariz aplicando sombras oscuras a los lados del tabique nasal y una línea clara en todo el tabique para que se vea más fina.
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Diseño de cejas
El visagismo también se usa en el diseño de las cejas, para definir una forma favorecedora. Lo primero que debes hacer es tomar un lápiz y ponerlo vertical en tu fosa nasal, allí debe comenzar tu ceja.
La ceja debe llevar una línea hasta el máximo punto, que lo vas a calcular mirando al frente y trazando una línea desde la parte de afuera del iris de tu ojo. Para saber dónde debe terminar tu ceja, coloca un extremo del lápiz en la comisura del labio hasta la parte externa del ojo, hasta allí debe llegar la línea.
El visagismo es una técnica que debes practicar para dominar, pero que te será muy útil y podrás ver un gran cambio muy favorecedor al momento de maquillarte.
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