Un grupo de científicos descubrió que un rana en una selva de Brasil es “fiel” a dos hembras, convirtiéndose en la primera especie de anfibio que tiene este comportamiento.
Los investigadores evidenciaron que la rana macho, de la especie Thoropa taophora, tiene este particular comportamiento ya que durante una misma temporada de apareamiento se emparejan con dos hembras que le visitan por “turnos”.
El zoólogo de la Universidad Estatal de Campinas, Fabio de Sa, explicó que se cree que este sistema de apareamiento (poliginia) es el más común entre los animales y se ha encontrado anteriormente entre peces, reptiles, mamíferos, aves e incluso en algunos invertebrados.
Para los científicos esto es algo poco usual para este tipo de anfibios, ya que por el contrario estos animales suelen tener una infinidad de parejas. Además, se sabe que la poliginia tiende a darse cuando los machos se ven obligados a competir entre sí por las hembras y por recursos ambientales como el agua y la comida.
El estudio publicado en la revista Science Advances también reseña que este tipo de ranas se reproducen en zonas rocosas con débiles corrientes de agua que están localizadas en la selva tropical al sudeste de Brasil.
Sin embargo, los investigadores de la Universidad Estadual Paulista (Unesp) descubrieron que esta sería una novedad; ya que las ranas se reproducen con frecuencia en pozos de agua en donde los machos atraen a las hembras cantando para que pongan los huevos de los futuros renacuajos.
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Además, tras realizar un análisis de las pruebas de paternidad los investigadores también se sorprendieron al descubrir que cada macho tenía una relación “estable” con dos parejas.
“Los renacuajos en diferentes etapas de desarrollo también eran hermanos por parte de la madre, lo que sugiere que las hembras permanecen en el charco durante todo el período reproductivo de 10 meses”, explicó Célio Haddad, biólogo y coordinador del grupo de la Unesp.
Unas parejas estables
Los investigadores descubrieron que los machos de esta especie de rana se relacionan con solo dos hembras, en su mayoría con una dominante pero también con una secundaria con quienes tiene unas relaciones de apareamiento de largo plazo.
“La ventaja para la hembra es que es mejor tener un macho y un sitio de reproducción de buena calidad para compartirlo con otra hembra, en lugar de estar expuesta y no encontrar a otro macho o a uno de menor calidad”, explicó De Sa.
Los investigadores pudieron determinar que, en promedio, el 85 % de los renacuajos eran hijos de la “esposa dominante”, mientras que el 15 % restante fueron generados con la “esposa secundaria”.
Además, en el estudio no se encontró que los renacuajos de un mismo macho vivan en charcos vecinos, lo que llevó a los científicos a deducir que cada uno defiende su zona de agua y de esa manera es fiel a sus compañeros reproductores, un comportamiento hasta ahora desconocido en los anfibios.
Finalmente, los investigadores aseguraron que se han visto casos de una tercera hembra que se acerca al trío de ranas y que termina apareándose con el macho, pero lo más frecuente es que se trate de una “ladrona de huevos” que los busca para comérselos.
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