La administración de una carretera en el estado de Río de Janeiro (Brasil) terminó la construcción de un puente para fauna que será destinado especialmente para la protección de una especie de monos que durante décadas ha estado en peligro de extinción.
La estructura cruza una carretera de cuatro carriles y tiene como objetivo facilitar el paso de las poblaciones de monos tamarinos leones dorados, las cuales se han visto afectadas por la deforestación y por los traficantes de animales que los capturan por su extraño color naranja y pelo brillante.
La construcción de este puente de 20 metros de ancho y más de 40 metros de largo se dio tras la presión de una organización ambiental y un fallo de la justicia, quien determinó que era necesaria la construcción de un paso elevado para contribuir a la conservación de la especie.
La estructura conecta la reserva biológica de Poco de Dantas, en la municipalidad de Silva Jardim (Río de Janeiro) con una finca que la Asociación del Tamarino León Dorado (AMLD) adquirió para convertirla en un parque ecológico de protección para esta especie.
“Nuestro objetivo es consolidar un panorama de conservación para los monos. El mayor problema es la fragmentación de los bosques, que ya estaban muy deforestados debido a la expansión de los centros urbanos”, declaró Luiz Paulo Ferraz, geógrafo y secretario ejecutivo de la AMLD.
De acuerdo con el experto, hacer esta conexión con las selvas les permite tener más espacio para que los primates deambulen y se reproduzcan, así como para conservar la diversidad genética de esta especie.
El proyecto de conservación
La organización conservacionista resaltó que sobre el puente fueron sembrados unos árboles con el objetivo de que en un par de años alcancen una altura adecuada para que los monos puedan cruzar de una franja de la selva a otra.
Sin embargo, en las últimas semanas ya se han visto algunos monos en los árboles de la selva cercana por lo que la construcción de este puente ya cumpliría su objetivo de protegerlos del cruce vehicular.
El grupo ambientalista The Nature Conservancy explicó que antes de la colonización, el bioma de la selva de litoral atlántico abarcaba más de 130 millones de hectáreas, las cuales fueron desmontadas en un 85 % amenazando a plantas y animales.
En ese sentido, la conservación de los monos tamarino león dorado se ha convertido en uno de los grandes símbolos de la protección de especies. Además, esta particular especie de mono se encuentra en los billetes brasileños de 20 reales.
Ver más: Registran el nacimiento de uno de los monos más extraños del planeta en un zoológico de Australia
La AMLD explicó que en la década de 1970, cuando los científicos emprendieron programas de conservación, existían sólo 200 ejemplares de esta especie de mono, pero con el paso de los años y con la creación de la reserva de Poco de Dantas se logró que esta especie pasara de una categoría de “críticamente en peligro” a especie “en peligro” de extinción.
“El número de tamarinos leones dorados alcanzó 3.400 en 2014. Un brote de fiebre amarilla en 2016 y 2017 causó la muerte de unos 900 ejemplares, el mayor golpe a esta especie desde el comienzo de las tareas de conservación”, explicó Carlos Alvarenga Pereira, coordinador del programa de restauración selvática de AMLD.
De acuerdo con el experto, se requiere seguir aumentando las áreas protegidas para poder aumentar la población de esta especie de mono.
“Es un desafío local y se necesita la participación de las comunidades rurales y los agricultores para reconvertir las tierras agrícolas improductivas en bosques recuperados”, dijo Pereira.
Infórmate minuto a minuto sobre esta y otras noticias del mundo en nuestras redes sociales