Para tener un hermoso manicure no necesitas ser una experta en uñas porque hay muchísimos modelos de nail art sencillos y rápidos de hacer. Así puedes divertirte en casa mientras perfeccionas la técnica.
Aunque consideres que pintarte las uñas puede ser todo un reto, lo cierto es que es bastante fácil. Además, con la práctica aprendes a dominar el truco y consigues un look perfecto. Sin embargo, para darle un toque más chic puedes agregar detalles modernos.
Te puede interesar: Decora tus uñas con esmalte espejo: una tendencia de manicure cautivadora
Diseños sencillos de nail art
Estrellas doradas
Si eres amante de las estrellas o quieres un manicure delicado esta opción te va a encantar. Lo único que tienes que hacer es elegir un color base claro y esperar hasta que seque. Cuando ya estén, coloca tres puntos de pegamento para uñas en zonas distintas y aplica estrellas. Finaliza colocando esmalte transparente con brillo.
¡La reina de las flores!
No es un secreto que los modelos floreados son muy solicitados. Sin embargo, esta propuesta no busca llenar de flores todas las uñas. Comienza seleccionando el color que deseas tener en tu manicure, luego, pinta por completo dos uñas en los dedos que prefieras y deja los otros para las flores.
Al culminar con esos pasos, busca un palillo y con la parte gruesa dibuja tres puntos oscuros en distintas zonas de la uña. Posteriormente, impregna el objeto del color seleccionado y realiza los pétalos de las flores. Dale el toque final aplicando un poco de brillo.
Huevos estrellados
Si te gustan los modelos menos convencionales puedes inclinarte por unos divertidos huevos estrellados. Pinta las uñas de un color claro, cuando seque, dibuja con un pincel o puntero la clara haciendo una especie de flor irregular. Después de eso, coloca un punto amarillo o mostaza en el centro. Con este diseño tendrás unas uñas muy cool.
Ombré nails
¿Quién dijo que esta tendencia es exclusiva para cabello? Aquí tienes una idea bastante chic para hacer que tu manicure luzca increíblemente atractivo.
Busca varios esmaltes que sean tonos similares, es decir, que estén dentro de la misma gama de color, después pinta cada uña de una tonalidad diferente. La idea es que vayas del color más oscuro al más claro para apreciar un ombré perfecto.
