Puede que solo dispongas del horario nocturno para darte un refrescante baño de espuma, sin embargo, existen razones poderosas para no dormir con el pelo mojado. Después de conocerlas, seguro le dirás adiós a este mal hábito.
Pareciera un acto inofensivo o incluso una rutina habitual creada luego de años haciendo lo mismo, no obstante, dormir con el pelo mojado puede perjudicar la salud de tu cabello más de lo que te imaginas.
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Razones para no dormir con el pelo mojado
Debilita la melena
Cuando el cabello está húmedo es mucho más frágil, por este motivo, si te acuestas con el pelo mojado corres el riesgo de que se quiebre, enrede o dañe al entrar en contacto por tanto tiempo con las cobijas y sábanas.
Por otro lado, la almohada es la que absorbe la humedad y eso hace que el cabello se reseque, ocasionando la perdida de flexibilidad y debilitando la melena el doble.
Inviertes más tiempo en peinar el cabello
Amanecer como un león, evidentemente, demanda más tiempo para peinar el pelo por la mañana. ¿Por qué ocurre esto? al dejar secar la melena sobre la almohada se permite que este accesorio para dormir le otorgue al cabello una forma y textura inesperada.
Elimina el brillo y la suavidad
La almohada no solo absorbe el agua del pelo mojado, también es capaz de eliminar los aceites naturales que humectan la melena. Esto produce un resultado opaco y con una sensación porosa, además, da paso a que regrese la debilidad capilar.
Propicia la aparición de la caspa
Seguro has escuchado que la almohada logra acumular muchas bacterias, entonces, imagina lo que ocurre si le agregas humedad. Al tener el pelo mojado sobre este objeto pueden desarrollarse más bacterias y hacer más propenso el cabello al malassezia, es decir, al hongo que causa la caspa.
¿Qué puedes hacer si tu única opción es dormir con el cabello húmedo?
A pesar de las razones antes mencionadas, si no tienes más alternativa que acostarte con el pelo mojado, entonces debes poner en práctica estos cuidados.
- Trata de secar la melena lo más que puedas, usa una toalla de microfibra o un paño limpio, pero no la dejes escurriendo sobre la almohada.
- Recoge el cabello con un ‘scrunchie’ o pinza, de esta forma logras disminuir la fricción. Además, aplica un poco de acondicionador sin enjuague en la zona de las puntas.
- Procura usar una funda a prueba de agua o sustitúyela por una de seda, así reduces la fricción y previenes el daño capilar.
- Por último, y el consejo más saludable, evita lavar tu cabello en las noches. Busca el momento idóneo para que la melena pueda secarse y no tengas que dormir con el pelo mojado.