Sentirse triste es una emoción natural, que incluso cumple una función importante para nuestro bienestar. Lo malo es cuando no se trata de una emoción pasajera, dejando a un lado los sentimientos positivos, en estos casos podríamos estar hablando de un caso típico de distimia, mejor conocido como trastorno depresivo persistente.
¿Qué es la distimia?
Para entender qué es distimia, hay que tener en cuenta que se trata de un trastorno depresivo persistente, una forma de depresión a largo plazo que se vuelve crónica. De igual manera puede hacer que las personas pierdan el interés en las actividades normales que realiza en su vida cotidiana, sintiéndose; desesperanzados, improductivos, con baja autoestima e incluso una sensación de ineptitud, según detalla Mayo Clinic.
Una persona con los síntomas de trastorno depresivo persistente o tristeza crónica, siente los efectos en su cuerpo, estado de ánimo y pensamientos. Además de alterar la manera en que se alimentan y afectando las horas de sueño, lejos de lo que muchos piensen; no se trata de ser débiles, ni es un estado que pueda modificarse a voluntad, ya que muchas veces ni siquiera quien lo vive sabe lo que está pasando.
Es común que los síntomas de la distimia afecten entre el 5 y 6% de la población en general, siendo más frecuente en mujeres que en hombres. Además las personas mayores pueden experimentar mayor dificultad para cuidarse sin ayuda, luchar contra el aislamiento o experimentan mayor miedo a enfermedades, explica Medline Plus.
Síntomas de la distimia
- Falta de interés en las actividades diarias
- Tristeza, sensación de vacío, depresión
- Desesperanza
- Cansancio y falta de energía
- Baja autoestima, autocrítica o sentirse incapaz o inútil
- Dificultades para concentrarse y tomar decisiones
- Irritabilidad o enojo excesivo
- Disminución de la actividad, eficacia y productividad
- Evitar las actividades sociales, aislamiento
- Sentimientos de culpa y preocupaciones por el pasado
- Falta de apetito o comer demasiado
- Dificultad para dormir
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Causas del trastorno depresivo persistente
Aunque no se conoce las consecuencias exactas que pueden originar los síntomas de la distimia, Mayo Clinic, sugiere que podría deberse a las siguientes causas.
Diferencias biológicas
Las personas con trastorno depresivo persistente pueden tener modificaciones físicas en el cerebro. Sin embargo, aunque no se conoce las causas de dichas modificaciones es posible que ayuden a señalar las causas de la distimia.
Química del cerebro
El cerebro contiene neurotransmisores, es decir sustancias químicas naturales que pueden influir en la depresión. La manera en cómo interactúan los neurocircuitos encargados de mantener la estabilidad del estado de ánimo, juegan un importante papel en la depresión al igual que en su tratamiento.
Rasgos heredados
Los síntomas de la distimia suelen ser más frecuentes en personas cuyos familiares de sangre experimentaron este tipo de trastornos. Pero todavía se encuentra en estudio cuales son los generes que causan dicho trastorno depresivo.
Acontecimientos de la vida
Tal y como sucede con la depresión, el trastorno depresivo persistente puede causarse por consecuencias de acontecimientos traumáticos que ha vivido una persona. Estos acontecimientos estarían relacionados a; perdidas de un ser querido, problemas económicos o alto nivel de estrés.
Otras causas de la distimia
Trastornos como este pueden existir debido a casos de enfermedades médicas como la cardiopatía, cáncer o diabetes, además de otros trastornos psiquiátricos como el abuso de drogas o la ansiedad. Su tratamiento dependerá de cada caso, edad y estado general de salud.
Complicaciones que generan la distimia
- Mala calidad de vida
- Depresión mayor, trastornos de ansiedad y otros trastornos del estado de ánimo
- Abuso de sustancias
- Relaciones difíciles y conflictos familiares
- Problemas en la escuela y el trabajo y reducción de la productividad
- Dolor crónico y enfermedades en general
- Pensamientos o comportamiento suicidas
- Trastornos de personalidad y otros trastornos de salud mental
Consejos para prevenir el trastorno depresivo persistente
En general la distimia puede comenzar en la niñez o adolescencia y continuar hasta la edad adulta. Identificar el trastorno a tiempo ayuda a que el paciente reciba un tratamiento temprano. Por eso es importante:
- Tomar medidas para controlar el estrés
- Buscar ayuda de familia y amigos
- Identificar un tratamiento antes el primer síntoma de tener un problema
- Tomar en cuenta la posibilidad de obtener tratamiento médico a largo plazo
Muchas personas pueden sentir miedo de aceptar que están lidiando con la tristeza crónica, pensando que serán juzgados. Sin embargo, este es un problema más común de lo que pensamos y la mejor manera de combatirlo es buscando ayuda profesional.
No permitas que la tristeza crónica se apodere de tu vida, recuerda que las personas fuertes también necesitan del apoyo de otros.
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