Colombia vivió una jornada de masivas manifestaciones sociales en varias ciudades del país en el marco de la convocatoria del paro nacional. Sin embargo, lo que inició con una marcha pacífica terminó con duros enfrentamientos de unos encapuchados con la Fuerza Pública.
Las movilizaciones más grandes se registraron en Bogotá, Medellín, Cartagena, Bucaramanga, Tunja, Pasto, entre otras ciudades, en donde miles de ciudadanos se congregaron para marchar contra el Gobierno del presidente Iván Duque.
La movilizaciones avanzaron de manera pacífica en horas de la mañana, pero sobre el mediodía se presentaron los primeros desmanes con las autoridades, los cuales fueron protagonizados por unos vándalos que atacaron a los uniformados de la Policía y algunas estaciones, paraderos y edificios públicos y comerciales.
Sin embargo, los manifestantes también condenaron los abusos de fuerza por parte del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) durante las protestas.
En las manifestaciones participaron diversos sectores políticos, sindicales, estudiantes, pensionados, quienes reclaman reformas en materia social y un mayor compromiso del gobierno con la protección de los líderes sociales y el cumplimiento del acuerdo de paz.
Los promotores del paro nacional estimaron que más de un millón de personas se habrían movilizado en todo el país, pero algunos sectores del gobierno indicaron que el número de manifestantes alcanzó las 207.000 personas.
La ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez, aseguró que la mayoría de manifestantes se movilizaron de forma pacífica en varias ciudades del país y condenó los desmanes que se registraron al cierre del día.
“En términos generales los participantes en las marchas lo hicieron de manera pacífica”, indicó Gutiérrez, quien reportó enfrentamientos entre encapuchados y autoridades en Bogotá, Medellín, Manizales y Cali.
Precisamente, la alcaldía de Cali decretó un toque de queda debido a los graves desmanes y saqueos a establecimientos comerciales que se presentaron durante el día, los cuales dejaron algunos uniformados y estudiantes heridos.
Por su parte, en Bogotá los enfrentamientos se registraron principalmente en la Plaza de Bolívar, en el Portal del sistema Transmilenio en la localidad de Suba y en la sede de la Universidad Nacional. En estos dos últimos puntos, se registraron graves ataques y saqueos a bienes públicos y privados, así como algunos incendios que se extendieron en horas de la noche.
Así se vivió la jornada de paro nacional en Colombia
Gobierno siguió el paro
El presidente Iván Duque reconoció la legitimidad de algunos de los reclamos de los manifestantes y durante una parte del día siguió el avance de las manifestaciones en el Puesto de Mando Unificado (PMU) con la Fuerza Pública y los ministros de Defensa y del Interior.
“No se puede invocar derechos para pasar por encima de los derechos de los demás”, manifestó Duque en la mañana de este jueves en referencia a posibles actos vandálicos y afectación a la movilidad.
Antes de la protesta social, el gobierno cerró las fronteras y expulsó a al menos 24 ciudadanos venezolanos acusados de querer infiltrar las marchas. Además, la Policía realizó controvertidos allanamientos contra centros culturales y medios de comunicación alternativos.
Sin embargo, a pesar de que las multitudinarias manifestaciones terminaron en algunos desmanes, el presidente Duque está enfrentando un duro momento para su gobierno con los reclamos sociales y un rechazo en las encuestas que alcanza el 69 %.
Precisamente, estas movilizaciones fueron convocadas por sindicatos, universitarios y sectores políticos opositores al Gobierno Duque, pero con el paso de los días se fueron sumando otros sectores sociales.
Estos movimientos han rechazado las supuestas reformas para flexibilizar el mercado laboral y cambiar el sistema de pensiones. Asimismo, han pedido mayores acciones para evitar la muerte de líderes sociales e indígenas en el país. Mientras que los estudiantes han pedido un mayor compromiso con los recursos para la educación superior.
En ese sentido, Colombia se está sumando a un ambiente de descontento social y político que se viene registrando en los últimos meses en Sudamérica, a pesar de ser uno de los países que tendrían un crecimiento económico muy por encima al promedio de la región.
Lo cierto, es que América Latina está viviendo uno de los ambientes más convulsionados de los últimos tiempos y se ha visto reflejado en la situación de países como Ecuador, Chile, Bolivia, entre otros.
Bogotá vive una noche tensa
Al cierre de este artículo, la capital del país registraba varios problemas de seguridad y orden público con saqueos y enfrentamientos entre encapuchados y miembros del Escuadrón Antidisturbios (Esmad)
Incendios, saqueos y daños a estaciones del sistema de Transmilenio se registraron en las últimas horas, por lo que las autoridades tuvieron que intervenir para controlar los disturbios que se registraban en la localidad de Suba (occidente) y la sede de la Universidad Nacional.
Sin embargo, tras una tensa jornada de protestas en el país, algunas personas decidieron hacer un cacerolazo en varios puntos de Bogotá, los cuales también se han registrado en ciudades como Cali en donde fue decretado un toque de queda.
Asimismo, la situación de orden público en el municipio de Facatativá (Cundinamarca), ubicado a 40 kilómetros de Bogotá, obligó a las autoridades a decretar también un toque de queda enfrentar los desmanes.
De esta forma, la jornada de manifestaciones del paro nacional en Colombia terminaron con unos desmanes que opacaron las multitudinarias marchas, las cuales fueron seguidas con un cacerolazo.
América Digital/ Agencias