El partido FARC, surgido del acuerdo de paz con la otrora guerrilla comunista en Colombia, denunció este domingo el asesinato de un excandidato departamental en una conflictiva zona del suroeste del país donde en las últimas semanas ha rebrotado la violencia.
Diego Fernando Campo fue asesinado la tarde del sábado en el municipio de Corinto, departamento del Cauca, con varios disparos “en hechos sin esclarecer”, indicó el movimiento de izquierda en un comunicado.
Campo, de 31 años, fue candidato de la Fuerza Alternativa Revolucionaria del Común (FARC) a la asamblea del departamento de Nariño, aledaño al Cauca, en las elecciones locales de octubre, en las que la exguerrilla tuvo resultados marginales, informó AFP.
El hombre militaba en el partido FARC pero no combatió durante el fallido alzamiento armado de medio siglo de la que fue la guerrilla más poderosa de América antes de firmar la paz en 2016, según la policía.
“Exigimos a los organismos del Estado celeridad en la investigación y el esclarecimiento de este crimen que hoy enluta nuevamente a nuestro partido”, agregaron los rebeldes.
Las FARC han denunciado el asesinato de 170 exguerrilleros y miembros de su movimiento desde la firma del pacto.
Teatro de guerra del sangriento conflicto colombiano, el Cauca es una zona de disputa entre rebeldes del ELN, disidentes de las FARC y narcotraficantes por el control de cultivos ilícitos y salidas de droga por el Pacífico rumbo a Estados Unidos.
Desde finales de octubre se ha registrado un fuerte rebrote de violencia en esa zona, que ha segado la vida de al menos 18 personas, la mayoría indígenas, según la Defensoría del Pueblo.
Las autoridades atribuyen la mayoría de los crímenes a los disidentes, que actúan sin mando unificado y se dedican principalmente al tráfico de drogas.
*Lea también: OEA recomienda repetir elecciones en Bolivia con un nuevo órgano electoral
El presidente Iván Duque ordenó a principio de mes el despliegue de 2.500 militares de élite para combatir a los grupos armados que operan en el Cauca.
Aunque aliviada por el acuerdo con las FARC, Colombia aún vive un enfrentamiento entre guerrillas, paramilitares, agentes estatales y narcos, que en seis décadas ha dejado más de ocho millones de víctimas, entre muertos, desaparecidos y desplazados.