Lima acogerá el 23 de noviembre la final única de la Copa Libertadores 2019 entre Flamengo y River Plate, según el anuncio de la Conmebol y luego de una extensa reunión, de más de seis horas, realizada en Luque, Paraguay. Se descartó a Santiago de Chile por la crisis social que atraviesa el país desde el 18 de octubre.
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La Conmebol explica el cambio de sede atendiendo a nuevas circunstancias de fuerza mayor y de orden público que cuidadosamente analizadas y evaluadas considerando la seguridad de los jugadores, el público y las delegaciones, motivaron la decisión de llevar la Copa Libertadores a Lima.
“La elección del nuevo escenario para la final de la Copa Libertadores se apoya en el ofrecimiento del gobierno del Perú, y en las garantías de seguridad que dio”, añadió el comunicado de la Conmebol.
El Monumental albergará la final, el escenario más grande de Sudamérica con capacidad para 80 mil personas. La Selección Perú es local en este recinto. Juega de local el Universitario de Deportes y el 2 de julio del 2000 fue inaugurado.
La Conmebol explicó que la decisión fue consensuada con los presidentes de Flamengo y River y de las asociaciones de Argentina, Brasil y Chile y se sustentó en la política de realizar cada una de las finales únicas en diferentes países.
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“Conmebol agradece vivamente al gobierno de Chile la activa colaboración que prestaron las diversas reparticiones públicas para la correcta organización de la Final Única” de la Libertadores 2019. “Deseamos al pueblo chileno y sus autoridades paz y buena voluntad”, finaliza el comunicado.
Lima era en un principio la sede para la final de la Copa Sudamericana de este año, que finalmente se trasladó a Asunción para este sábado, debido a cuestiones organizativas. Las conexiones del Aeropuerto Jorge Chávez, el buen clima y la capacidad del escenario, llamó la atención de todas las partes.
Durante la reunión, Bogotá y Medellín entraron a la puja y Colombia estuvo cerca de ser escogida, al igual que Miami y Montevideo, pero al final los pocos kilómetros de recorrido y cuestiones logísticas, hicieron a Lima la ciudad ideal para el partido. Pasará a la historia como la primera en acoger la final única de la Libertadores.