La presidente del Colegio de Enfermería del Distrito Capital, Ana Rosario Contreras, rechazó en nombre del gremio el aumento “írrito” del nuevo salario mínimo integral a BsS 300.000 decretado por el Ejecutivo al calificarlo de una “burla que se ha realizado de una manera casi anónima” y a su juicio, los venezolanos “continuamos en pobreza extrema”.
En ese sentido, hizo un exhorto al mandatario Nicolás Maduro a “indexar” el salario mínimo al costo de la canasta básica según lo que dice la Constitución en el artículo 91. Esta se encuentra por el orden de los cinco millones de bolívares, dinero que a juicio de Contreras se hace insuficiente para mantener las familias debido a la galopante hiperinflación que se registra en Venezuela desde hace al menos dos años.
Recordó que en agosto de 2019 fue llevada a la Vicepresidencia “una tabla salarial indexada en dólares”, para exigir que el salario pudiera estar equivalente a lo que el mercado está exigiendo en la actualidad, que es en moneda extranjera. Agregó que según los niveles de la ONU, en los que se señala un sueldo mínimo de $2 por día, los venezolanos están por debajo de la la línea roja.
Contreras anunció que el gremio de enfermeras se suma a las protestas en la calle y se unen a la que los educadores llevan desde hace varios días. “El problema para nosotros es similar. Condiciones de trabajo indignas, donde muchos de nuestros miembros están afectados su salud, por no tener barreras de protección, por no contar con insumos necesarios para dar atención a los usuarios y amén de que ya no queremos seguir trabajando de gratis que tenemos familia que mantener”.
Dijo a los pacientes que no pueden seguir prestando servicio de forma gratuita y que por eso exigen que los salarios sean indexados a la hiperinflación. “No queremos irnos del país. El 60% de nuestros compañeros han decidido irse del país, irse a otros oficios que le genera mayor dividendos”.
Pidió a la sociedad venezolana que defienda el derecho a la salud, así como los demás servicios públicos.
Subrayó que el gremio de enfermeras está organizado en todos los estados del país porque las condiciones en las que está la nación lo ameritan, ya que hay una violación “flagrante y sostenida” por parte del Estado.