Este lunes se sostuvo una reunión en la Casa Amarilla entre el régimen y cuestionados actores de la oposición venezolana para llegar a un acuerdo “que permita encontrar una solución a la crisis venezolana”.
Por la administración de Nicolás Maduro, en el encuentro participó ministro de Comunicaciones, Jorge Rodríguez; la vicepresidenta, Delcy Rodríguez y el constituyente, Aristobulo Iztiruz.
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Entre los presentes se encontraban Claudio Fermín, aliado del ex candidato presidencial Henri Falcón, y el diputado Timoteo Zambrano. Así como también, actores de los partidos Avanzada Progresista, Cambiemos y Movimiento al Socialismo (MAS).
Por su parte, Rodríguez informó que concertaron la reincorporación de los diputados de la fracción del chavismo a la Asamblea Nacional y la “superación del desacato” que ha impuesto el chavismo a esta institución desde que la oposición se hizo con la mayoría del parlamento.
Asimismo, exigieron el levantamiento de sanciones y acordaron expresar el rechazo a la mismas. También buscarán impulsar el programa Petróleos por Alimento, aplicado en Irak entre 1995 y 2003 por el que estallaron casos de corrupción que involucraban a la Organización de Naciones Unidas (ONU).
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Acordaron emprender una nueva ofensiva por el reclamo del territorio de la Guayana Esequiba y permitir que continúe el funcionamiento de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC).
A su vez, exigirán una representación proporcional de las minorías en las elecciones parlamentarias y buscarán potenciar el trabajo en conjunto con empresas publicas y privadas.
Rodríguez manifestó que se deben mantener abiertas “todas las puertas para el diálogo” y que el régimen no ha “cerrado ni cerraremos ninguna puerta, ninguna iniciativa para resolver” lo crisis que atraviesa Venezuela, a pesar que el chavismo se levantó de la negociación que sostenía con la oposición, comandada por Juan Guaidó, y que era mediada por Noruega.
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Por su parte, el diputado Zambrano exigió nuevos rectores para el Consejo Nacional Electoral (CNE) y ratificó la “urgencia social” de impulsar el programa Petróleo por Alimentos.
“No sera un camino facil pero es el unico camino. (…) Asumiremos un costo significativo”.
Por otro lado, fuentes diplomáticas explicaron a la agencia EFE que los embajadores de los países de la Unión Europea se retiraron del acto, al que asistieron por cortesía, pese a no haber sido informados previamente de la temática del evento.
Al ver de qué se trataba, optaron por abandonar el lugar, ya que los diplomáticos europeos mantienen su postura de defender el proceso de diálogo auspiciado por Noruega, que fue suspendido por el régimen.
