El coordinador general del sindicato de la Corporación Venezolana de Guayana- CVG- Rubén González, fue condenado este martes a cinco años y nueve meses de prisión por el delito de “ultraje al centinela y a la Fuerza Armada nacional”.
No obstante, la sentencia se efectúa bajo ciertas contradicciones, porque el tribunal decidió retirar de las acusaciones el delito de “ataque al centinela” y únicamente tomó el de “ultraje”.
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“¿Cómo puede haber un ultraje al centinela sino hay ataque al centinela? Si no hay ataque al centinela que era el delito de mayor cuantía de 14 a 20 años, menos puede haber ultraje. Es una decisión amañada y ya cocinada”.
De acuerdo al relato de Machuca, el 13 de agosto de 2018, a González se le impidió la entrada a una asamblea informativa realizada en la sede de Ferrominera en Ciudad Piar, en el estado sur de Bolívar, por parte de militares regionales y sindicalistas adeptos al chavismo.
“González decidió irse para su casa, los funcionarios se le suben a la camioneta, no quisieron bajarse y se trasladaron hasta su casa, donde fue violentado su hogar”.
¿Por qué es González es tan incómodo para la administración de Nicolás Maduro?
En entrevista con César Miguel Rondón, Machuca resaltó el liderazgo en la conducción del tema laboral y sindical en Guayana, zona por excelencia productiva del país, es “una piedra en el zapato” porque es coordinador general de los trabajadores de Guayana, secretario de Sintraferrominera y encabezó las luchas en defensa de sus compañeros.
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Además, mantuvo el reclamo a un gobierno que “escamoteó” a los trabajadores y permaneció de pie frente a “un grupo de cómplices sindicalistas, que destruyó los salarios y violó los contratos colectivos”.
Al conocer la sentencia, González envió un mensaje:
“Por estas palabras que dije en Caracas soy juzgado: este pueblo va a ser feliz si Maduro desaparece del gobierno”.
Machuca añadió que acudirán ante organismos internacionales para denunciar el “atropello” al que fue sometido el sindicalista, “los derechos no pueden ser de un grupo de personas que intentan por la vía de la fuerza sumir al pueblo en la mengua e indignidad”.
Rubén González fue detenido la madrugada del jueves 29 de noviembre de 2018, luego de que guardias nacionales retuvieron en Anaco a 60 trabajadores de empresas básicas de Guayana, entre ellos el dirigente sindical.
Regresaban de una protesta laboral realizada en la capital venezolana, en la que trabajadores de la administración pública exigieron a Nicolás Maduro el respeto a las convenciones colectivas y las tablas salariales, violadas a partir del 20 de agosto cuando se les impuso a las empresas básicas el tabulador de la administración pública. La medida desmejoró sus beneficios laborales en más de 70 %, denunció entonces la dirigencia sindical en Guayana.
El viernes de esa misma semana un tribunal militar de Maturín le dictó privativa de libertad y lo trasladaron a La Pica, en el estado Monagas, al centro de Venezuela.