El expresidente de Pdvsa y actual presidente del IESA, Gustavo Roosen, advirtió que la situación real de la estatal petrolera deriva de tres variables principales como la falta de inversión, la falta de gerencia y las limitaciones que existen para poder operar en el mundo financiero actual.
Alertó además que la mitad de la producción actual que sale del país proviene de las empresas mixtas, donde Venezuela tiene el control del 60 o 70% de la participación “pero que cada vez más son operadas por las trasnacionales”.
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Roosen indicó que la producción de petróleo en Venezuela se situó en mayo en 763.000 barriles de crudo diario (bpd) y teme que la misma, en los campos que administra Pdvsa en su totalidad, puede que esté generando menos de 400 mil en los campos en donde está el “lomito” del hidrocarburo como en el Lago de Maracaibo o en El Furrial, estado Monagas. Agregó que las constantes fallas eléctricas, por lo menos en el estado Zulia, han mermado de forma “determinante” la producción.
“El estado Zulia producía 1.100.000 bpd en 1998 y en mayo de 2019, produjo 360.000, cayendo a niveles muy bajos por razones de electricidad y el robo de las estaciones como en el Lago y los pozos en tierra firme. Es muy probable que podamos caer por debajo de 500 mil barriles de seguir la cosa como está”, dijo el 17 de julio en el programa En Conexión, conducido por César Miguel Rondón.
Teme que para 2020, las remesas puedan representar una mayor cantidad de ingresos en divisas que las exportaciones petroleras si se mantienen las condiciones actuales, al tiempo que dijo que podríamos depender aún más de las empresas mixtas “en cuyas manos está parte de la recuperación futura cuando comience la transición”.
A su juicio, la gerencia actual de Petróleos de Venezuela no podrá detener la caída de la producción y estima que para poder mantener los niveles, puede que tenga que llegar a acuerdos adicionales con las empresas mixtas e ir cediendo los campos que son administración exclusiva de Pdvsa, que no estaban dentro del convenio establecido en la Faja Petrolífera del Orinoco.
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Dijo que de esa forma podría construirse un “refugio práctico” porque al no tener recursos financieros y una gerencia inoperante, no se puede mantener una producción “porque la declinación petrolera sigue estando entre el 23 y el 25%”.
Manifestó que Estados Unidos, que es el mayor productor de petróleo y gas del mundo, “tiene la llave de la solución en sus manos” para la crisis venezolana al aplicar medidas restrictivas a Cuba, aunque ve “políticamente difícil” que las mismas tengan un efecto rápido debido a que las elecciones de 2020 están a la vuelta de la esquina en EEUU, considerando que el voto latino -acompañado del venezolano- será crucial para Donald Trump y ellos estarán “muy pendiente” de la celeridad con que se apliquen las medidas.
