Expertos aseguran que dormir bien te hace lucir más joven y mucho más radiante, pero ¿dormir por tres décadas funcionaría? Este es el asombro y extraño caso de Karolina Olsson, una joven que durmió ni más ni menos que 32 años.
La mujer mejor conocida como la ‘Durmiente de Oknö’ vivió en la isla Oknö, al sur de Suecia, en compañía de su familia pesquera. Sus vecinos la identificaban como una mujer con espíritu aventurero y arriesgada a explorar lo que se cruzara en su camino. “Un día bajé las escaleras de mi casa y vi una niña pisando una serpiente. (…) Era Karolina, quien la tomó con una pala, caminó hasta el hormiguero al otro lado de la casa y la tiró muerta”, mencionó uno de sus vecinos.
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Pero en 1975, con tan solo 14 años se quedó dormida, nadie de su familia pudo despertarla. El médico que fue a revisar aseguró que se trataba de un engaño “una tramposa, rechazada en la primera comunión, que se había acostado para fingir estar enferma”, mencionó el medio local SvD Kultur.
Pasaron días y los comentarios salían a la luz: “Se cayó y se golpeó la cabeza en el hielo o le dio dolor de muelas y se enfermó”, escuchó Marianne Nilsson, familiar de la joven.
Debido a esta terrible situación la familia decidió llevarla al hospital, pero no entendían qué le había sucedido a la joven y tras estar en la clínica un mes, los médicos la dieron de alta, ya que no entendían con sensatez lo que sucedía, ese mismo día le diagnosticaron parálisis general y demencia paralítica.
Pero “cuando la gente se enteraba de la existencia de Karolina la trataban con dudas y hasta desprecio. Ella estuvo protegida por muchos años en su habitación de la pequeña cabaña; los visitantes ni siquiera notaban que ella estaba postrada en la cama”, mencionó un familiar al medio.
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Sin embargo, algo extraordinario ocurrió, la mujer que durmió durante 32 años se escuchó llorar debido a la muerte de su madre, pero aún no despertaba. Sin embargo, al siguiente año, lo hizo: abrió los ojos, habló y se movió. La familia celebró esta nueva etapa de la joven tras estar ‘dormida’ por más de 30 años.
“Cuando Karolina despertó tenía 46 años, pero parecía de 25”, mencionaron los periodistas del diario. Debido a esta extraña situación, el psiquiatra Harald Fröderström se dirigió donde se encontraba la joven para saber con exactitud qué había pasado durante todo este tiempo.
Pero sus conclusiones fueron muy impactantes, ya que comentó que la madre de la joven la había sobreprotegido. En ese entonces la niña estaba en el colegio y tenía su primera menstruación. Pero su madre, debido a que su cuerpo mostraba cambios hormonales, decidió mantenerla en casa para prohibir que algo peligroso ocurriera.
“Innumerables madres han sido culpables gracias a la extraña mezcla de entrega irracional y egoísta del amor materno. Tampoco es una idea irrazonable decir que ella, con respecto a sus propias experiencias durante su propia crianza, quisiera proteger a su hija o, en otras palabras, protegerla de las tentaciones y el mal de la vida”, mencionó el especialista Fröderström.
Y aunque la mujer que durmió durante 32 años se veía mucho más joven, no pudo disfrutar de esas etapas de juventud por dormir más de lo habitual.
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