Una abuela de 77 años se ha convertido en un gran ejemplo de vida luego de que lograra graduarse de una universidad en Colombia a pesar de su avanzada edad.
La protagonista de esta historia es Noralba Garzón, una colombiana que decidió anteponerse a los obstáculos para cumplir su sueño de convertirse en una profesional.
De esta forma, esta mujer logró ingresar a la Universidad del Quindío para estudiar una licenciatura en ciencias sociales, con un énfasis en básica primaria, demostrando que la edad no es un límite para cumplir los sueños.
Esta abuela inició sus estudios en 2014 y logró terminar y aprobar su trabajo de grado en 2020, pero la llegada de la pandemia hizo que la entrega de su anhelado título se tuviera que postergar hasta este año.
“Por su ejemplo de vida y como tributo a su espíritu de superación, constancia y persistencia, al compartir las aulas de clases con nuevas generaciones que le acogieron con respeto y admiración”, reseña un reconocimiento hecho por el centro universitario.
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La universidad también aseguró que Noralba es un gran ejemplo de la “esencia de la mujer colombiana” que sabe anteponerse a las dificultades para salir adelante.
Un sueño cumplido
La abuela aseguró que desde niña siempre tuvo como sueño entrar a la universidad pero las condiciones socioeconómicas de su familia fueron su principal obstáculo.
De esta forma, Noralba empezó a realizar sus estudios de primaria en el año 2000 y logró avanzar a secundaria con la ayuda de su hija mayor, que se desempeña como abogada.
Por su avanzada edad pensó que no podía ingresar a cursar sus estudios universitarios pero el apoyo de su familia fue fundamental para que fuera admitida en la Universidad del Quindío para cumplir su sueño de ser una profesional.
La abuela indicó que la condición de autismo de una de sus nietas fue su mayor impulso y motivación para obtener este título ya que siempre veía las dificultadas que tiene la niña para hablar y comunicarse con otras personas. Además, esta vivencia la inspiró a hacer su tesis de grado sobre este trastorno.
“El estudio nunca sobra. Si uno no estudia, no es nadie. He visto con mucha tristeza cómo las personas por su edad o por alguna otra razón, y a pesar de tener la forma de estudiar, tienen un concepto tonto y se cierran a esa posibilidad”, indicó Noralba.
De acuerdo con esta mujer, muchas personas creen que los adultos mayores no tienen capacidades para enfrentarse a este importante reto porque supuestamente las enfermedades y su poca formación escolar les impide leer y escribir con facilidad e incluso aprender a manejar un computador.
“A nosotros los mayores nos dan algunas enfermedades relacionadas con la inactividad de nuestra cabeza, de nuestro cerebro, algo que se podría mitigar, por ejemplo, con estudios en alguna materia. Esta es una garantía que uno tiene de estar sano y lúcido”, resaltó.
Finalmente, Noralba fue homenajeada durante la ceremonia de grado en donde recibió su anhelado título, por lo que fue ovacionada por todo el auditorio al convertirse en un gran ejemplo de perseverancia y ejemplo de vida para las nuevas generaciones.
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