Una sorprendente historia se registró en Alemania en donde un hombre de 61 años decidió vacunarse en múltiples oportunidades contra el COVID-19 para obtener los certificados y comercializarlos a las personas que no querían ser inmunizadas.
Los hechos se registraron en la ciudad de Magdeburgo en donde este hombre, del cual no se conoce su nombre, recibió cerca de 90 dosis en los centros de vacunación en el estado de Sajonia en el este del país.
De acuerdo con las autoridades, este ciudadano se habría presentado hasta tres veces en un día para recibir esta inmunización contra el COVID-19 y se cree que venía realizando esta práctica desde el verano de 2021.
El sujeto fue detenido y se encuentra bajo investigación por la emisión no autorizada de constancias de vacunación y por falsificación de documentos públicos.
Convertido en ‘conejillo de indias’
El hombre fue descubierto en uno de los centros de vacunación donde comenzó a levantar sospechas luego de que se presentara por segundo día consecutivo para que se le aplicara una nueva dosis de la vacuna contra el COVID-19.
De esta forma, algunos trabajadores contactaron a las autoridades para reportar este extraño caso y al llegar al lugar los oficiales le confiscaron varias constancias de vacunación y le iniciaron un proceso penal.
Lo extraño es que mientras una parte de la población mundial sigue siendo reticente a vacunarse frente al COVID-19, este hombre decidió irse al extremo y convertirse en un ‘conejillo de indias’ al aplicarse aproximadamente 87 vacunas de diferentes compañías farmacéuticas.
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La agencia alemana de noticias Deutsche Welle (DW) reseñó que cada vez que el hombre se acercaba a un puesto de vacunación iba con un certificado en blanco para luego comercializarlo.
“Después de recibir el pinchazo, quitaba las páginas con la información sobre los números de lote de vacunas y las vendía a los opositores a las vacunas para certificarse falsamente y poder entrar en sitios donde la vacuna era un requisito”, reseñó DW.
De esta forma, el hombre se registraba para las citas de vacunación usando su mismo nombre pero nunca presentó su tarjeta de seguro lo cual lo habría puesto al descubierto.
Si bien la población alemana se ha mostrado receptiva con la inmunización contra el coronavirus, algunas localidades se encuentran un poco más rezagadas debido a que todavía existen muchos alemanes que niegan la severidad de la pandemia y rechazan vacunarse.
El país cuenta con cerca del 75 % de su población inmunizada con las vacunas, pero las cifras en el estado de Sajonia bajan hasta el 64,5 % de personas vacunadas, unas cifras que están muy por debajo del promedio de otros países europeos.
“Un registro nacional de vacunas o un registro específico de las vacunas contra el coronavirus habría arrojado luz sobre el caso de inmediato”, argumentó un portavoz de la asociación médica estatal de Sajonia.
Las autoridades esperan que el hombre sea judicializado y sea llevado a un centro de investigación médica para analizar la forma como su organismo ha actuado a la aplicación repetida de estas vacunas provenientes de diferentes laboratorios.
Lo curioso es que mientras una parte de la población no ha querido vacunarse, este hombre decidió más allá de un interés de salud, recibir cerca de 90 dosis para vender los certificados de vacunación a los que todavía son escépticos de la pandemia del COVID-19 pero que requieren este documento para ingresar a algunos espacios o eventos públicos.
Los expertos han asegurado que este irresponsable acto no le provocará ninguna consecuencia o beneficio para la salud de este hombre ya que aplicar mayores dosis de forma consecutiva no garantiza que el organismo tenga mayores anticuerpos para enfrentar la infección de este virus.
Finalmente, los medios locales reseñaron que este ciudadano de 61 años si podría enfrentar una pena de entre seis meses a 10 años, según la gravedad de los delitos de fraude que se determine en un tribunal.