La Organización Meteorológica Mundial (OMM) confirmó unos nuevos récords de duración y distancia de dos megarrayos en Suramérica y Estados Unidos.
El comité de científicos analizó las condiciones físicas en las que se presentaron estos fenómenos naturales para evaluar sus características.
“Se trata de valores extraordinarios observados en rayos individuales. Las mediciones de fenómenos medioambientales extremos son una prueba viviente de toda la fuerza de la naturaleza, así como de los avances científicos que ahora nos permiten realizar esas evaluaciones”, indicó Randall Cerveny, científico de la OMM.
De esta forma, los investigadores han sido cada vez más efectivos a la hora de analizar estos fenómenos meteorológicos ya que la instrumentación en tierra en conjunto con los satélites han suministrado una gran cantidad de información para validar estos récords.
El de mayor duración
Los expertos confirmaron que un rayo que se registró entre Uruguay y el norte de Argentina el 18 de junio de 2020 impuso el récord como el fenómeno de este tipo de mayor duración en el planeta.
La OMM explicó que este megarrayo tuvo una duración de 17,1 segundos en medio de una fuerte tormenta que se registró entre estos dos países de Suramérica.
Esta fuerte descarga eléctrica superó el anterior récord que también se había presentado en Argentina en marzo de 2019, cuando se registró un evento que duró 16.73 segundos.
El informe reseña que América es muy conocida por ser una de las regiones den mundo en donde se registran con más intensidad y duración este tipo de fenómenos meteorológicos.
El de mayor distancia
La Organización también certificó el megarrayo que recorrió la mayor distancia horizontal en el mundo, luego de que analizara los registros que impuso una descarga que se presentó en el sur de EE.UU.
Los datos dan cuenta que este rayo se registró el 29 de abril de 2020 y recorrió una extensión de 768.8 kilómetros superando por cerca de 60 kilómetros el anterior récord que se dio en el sur de Brasil el 31 de octubre de 2018.
“Ese registro equivale a la distancia entre las ciudades estadounidenses de Nueva York y Columbus (Ohio), o entre Londres y la ciudad alemana de Hamburgo”, indicó la OMM.
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El especialista en estos fenómenos y miembro del comité, Ron Holle, aseguró que no es extraño que estos nuevos récords se hayan registrado en las grandes llanuras de América del Norte y la cuenca del Plata en Suramérica.
“Estas descargas extremadamente extensas y de larga duración no fueron episodios aislados, sino que se produjeron en el marco de tormentas activas. Cada vez que se oyen truenos, es momento de buscar un lugar seguro para protegerse de los rayos”, señaló Holle.
Los peligros de los rayos
La OMM indicó que los rayos son un fenómeno natural de gran peligro y que cada año provocan la muerte de decenas de personas en el planeta.
Estos rayos están asociados a una serie de condiciones meteorológicas específicas que definen su intensidad en los territorios en los que se forman.
“Si el tiempo que transcurre entre el rayo y el trueno es menos de 30 segundos, ¡hay que buscar refugio! Y es aconsejable esperar 30 minutos después de que se haya observado el último rayo antes de retomar las actividades al aire libre”, resaltó la OMS.
La organización aseguró que los lugares más seguros para protegerse de los rayos se encuentran en los edificios y el interior de los automóviles que cuenten con una estructura completamente cerrada.
Por su parte, los sitios que representan mayor peligro y riesgo son las zonas al aire libre como parques, calles, paradas de autobuses, carpas o kioscos.
“Los rayos son un gran peligro que se cobra numerosas vidas cada año. Estos récords ponen de relieve cuestiones de importancia para la seguridad pública respecto de las nubes electrificadas en las que los rayos pueden recorrer distancias enormes”, explicó el profesor Petteri Taalas, secretario general de la OMM.
Finalmente, la organización reseñó que en la historia 21 personas murieron en Zimbabwe en 1975 luego de que un rayo cayera directamente en la choza en la que se estaban resguardando.
Asimismo, en 1994 se registró la muerte de 469 personas en Dronka (Egipto) cuando un rayo indirecto impacto un depósito de combustibles y provocó el derrame del liquido en llamas hacia la ciudad.
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