Una joven argentina se ha convertido en un gran ejemplo de superación luego de que sufriera un lamentable accidente cuando era tan solo una bebé.
La joven es conocida como Brisa y con tan solo 7 meses sufrió quemaduras en el 88 % de su cuerpo tras un incendio que se originó mientras dormía.
Los hechos se registraron el 17 de diciembre del año 2000 cuando una conflagración en su vivienda en la ciudad de Salta le cambiaría completamente su corta vida.
La niña estuvo a punto de morir y a pesar de su grave condición pudo anteponerse a las adversidades para convertirse en un gran ejemplo de superación.
Con la gravedad de sus heridas, la niña fue trasladada a la ciudad de Buenos Aires en donde tuvo que entrar inmediatamente al quirófano en donde, debido a las quemaduras, perdió una mano.
En la actualidad, Brisa tiene 21 años y se ha destacado como una gran deportista al obtener varias medallas y ha sido la ganadora de tres certámenes de belleza.
Una lección de vida
Brisa ya es una exitosa profesional que aprendió a superar las adversidades de la vida para convertirse en un ejemplo de resiliencia para la sociedad.
Desde que era muy pequeña empezó a asistir al Hospital de Pediatría Garrahan para que le trataran las graves heridas y recibiera ayuda psicológica tras el lamentable incendio.
Su abuela y ‘mamá’ Mirta nunca la desamparó y la ha acompañado a enfrentar el duro proceso de recuperación y de confianza ante las marcas que le dejó las quemaduras en su cuerpo.
“Brisa utiliza un casco especial porque sobre las meninges (telas que cubren el cerebro) directamente tiene la piel. El grado de complejidad es muy alto y las situaciones que atravesó en su infancia, producto de aquel incidente, son tantas que cuesta enumerarlas”, reseñó el hospital.
Lo cierto es que esta joven argentina supo anteponerse ante todas estas adversidades y nunca tuvo miedo de rehacer su vida a pesar de sus quemaduras en el cuerpo.
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En la actualidad trabaja en la oficina administrativa del Área de Deportes del gobierno de Salta. Además, se ha destacado como una gran deportista y modelo publicitaria.
Esta joven ha ganado medallas de bronce en 100 metros y de plata en 150 metros y lanzamiento de bala. Sin embargo, su gran impulso de superación la llevaron a ganarse la medalla de oro en 200 metros a pesar de que durante la carrera salió más tarde que sus rivales al no escuchar la señal de salida.
Brisa incursionó en el modelaje en medio de la pandemia y tras subir varias fotos en sus redes sociales fue invitada a participar del concurso de ‘Miss Belleza Mundial’.
Durante este certamen obtuvo tres reconocimientos como la foto más votada en las redes sociales, la mejor compañera y la mujer más fuerte.
Toda esta experiencia la ha motivado a continuar con su carrera como modelo y por eso ya hace parte de una agencia de modelaje en su ciudad.
Esta joven que sufrió quemaduras en su cuerpo ha tenido que superar la vergüenza y las miradas estigmatizantes, pero ella sabe que es un ejemplo para el mundo y no piensa cambiar su imagen para satisfacer a los demás.
“Los miro a los ojos hasta que bajan la mirada o la desvían a otro lado. Si existiera la posibilidad de hacerme un trasplante de cara no la aceptaría. Me miro al espejo y me gusta como soy”, indicó Brisa.
Esta joven ahora quiere crear un espacio para brindar ayuda a los niños y personas que atraviesen situaciones tan complejas como las que ha vivido.
“Nadie es más ni menos que otra persona, todos somos iguales. Si quieren hacer algo que les gusta solo tienen que proponérselo y hacerlo. Lo que yo me propuse hacer, lo logré siempre”, destaco.
Finalmente, Brisa quiere iniciar sus estudios para ser profesora de educación física especial y trabajar con niñas y niños; así como continuar con su sueño de ser modelo y brindar ayuda a través de su organización.
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