El estado de Utah, en Estados Unidos, aprobó una ley que obliga a los padres biológicos a cubrir la mitad de los gastos del embarazo, en un intento por aliviar la carga económica de tener hijos para las mujeres.
De acuerdo al New York Post, la medida ha encontrado resistencia entre quienes piensan que no es suficiente para ayudar a las madres y que, por el contrario, puede poner en peligro a las que ya se encuentran en relaciones abusivas o en situación vulnerable.
Aunque esta es considerada la primera ley que obliga a los padres a hacerse cargo de los gastos del embarazo, otros estados como Wisconsin y New York han tomado medidas para que los padres se hagan financieramente responsables de los hijos que engendran.
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Los republicanos han promovido este tipo de legislaciones, ya que constantemente se les critica por querer evitar el aborto libre y seguro, pero no hacen leyes que hagan más fácil para las madres tener a sus hijos.
De acuerdo a los promotores de la ley, el objetivo es hacer que la carga de tener a un hijo no sea tan fuerte para las mujeres.
Los gastos prenatales son principalmente médicos e incluyen exámenes médicos, ecos, citas de control obstétrico, vitaminas, dieta sana y saludable, además de los gastos del parto natural o cesárea, de acuerdo a cada caso.
En el caso de que la paternidad esté en disputa, el pago lo hará quien sea establecido como el padre biológico por la vía legal.
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Ya las madres tienen el derecho a solicitar una pensión alimenticia, pero poco o nada se había hecho para que los padres se hicieran responsables de todos los gastos que acarrea un embarazo.
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