En medio de los aislamientos provocados por la pandemia del coronavirus, una granja en Alemania ha diseñado una iniciativa para que las personas puedan abrazar sus ovejas y de esta forma puedan superar ese sentimiento de soledad.
La particular propuesta ha sido diseñada por la granjera Lexa Voss quien explicó que muchas personas están pasando momentos difíciles al estar solos en medio de los confinamientos y la imposibilidad de poder abrazar y estar cerca de otras personas por las restricciones del COVID-19.
“Dejar que vengan, abracen y mimen a las ovejas les puede ayudar”, aseguró Voss desde su granja, situada en una zona de colinas en Hattingen, al oeste de Alemania.
De acuerdo con esta granjera, las ovejas son unos animales muy tranquilos y pasan todo el día pastando en el campo y les encanta recibir a las personas.
En ese sentido, cree que estar en contacto con los animales en un entorno completamente natural y alejados de las noticias sobre mascarillas, contagios, restricciones y muertos, puede ayudarle a las personas a sanar un poco su soledad.
“Es muy curioso porque cuando la gente llega dice que se siente muy saturada, asfixiada. Pero en cuanto ven que los animales se les acercan para que les den cariño, en cuanto empiezan a entrar en contacto con ellos, se relajan. Al momento les cambia la cara y el ánimo”, explicó Voss.
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Es tal el nivel de interacción que se logra con estas ovejas que algunas personas le han comentado que se sienten “amados y unidos” ya que su experiencia los renovó completamente.
De esta forma, las personas que quieran vivir esta experiencia en la granja ‘En los Álamos’ deberán hacer una reserva por correo o teléfono en donde les explicaran las condiciones del servicio.
Además, también les informarán sobre los nombres y personalidades de cada una de las ovejas, con las que podrán compartir durante al menos una hora.
Una experiencia transformadora
La granjera explicó que además de ir a sus instalaciones para aliviar la soledad y mitigar la fatiga de la pandemia, algunos visitantes han asegurado que su encuentro les ha dejado una experiencia transformadora.
“Algunos experimentan aquí por primera vez lo que es estar con un animal de cerca, reconocen su personalidad y eso les hace cambiar las ideas que tenían a priori sobre los animales y aprender de ellos”, explicó Voss .
Para esta granjera, además de los conocimientos que los visitantes puedan adquirir sobre los animales y la vida en el campo, la educación emocional es fundamental en esta iniciativa en donde los sentimientos y emociones pueden salir a flote libremente.
“Muchas veces están tocados emocionalmente. A veces no puedes decir por qué, pero cuando los caballos y ovejas están cerca, la emoción viene a tu cuerpo y a veces sientes cosas que no habías sentido hace mucho tiempo”, comenta Voss.
De esta forma, las personas que quieran asistir tendrán que hacer un donativo ya que se requiere dinero para alimentar a los 29 animales que hay en la granja, la cual también vio reducidos sus ingresos por cuenta de la pandemia.
En ese sentido, su particular iniciativa tiene el propósito de no solo brindar una ayuda para las personas sino también recibir recursos para mantener el bienestar de sus animales, entre los que también se encuentran caballos, perros, gansos, gatos, entre otros.
“Digamos que suelen dejar unos 20 euros por persona, pero pueden dejar más o menos, según se lo pasan. Es una ayuda muy grande para nuestra granja para sobrevivir estos días”, concluyó esta granjera.
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