Yeferson Soteldo es pequeño, es cierto, pero no tiene miedo de usar la camiseta y los zapatos de un gigante para el Santos de Brasil y el fútbol en general: Pelé. Cuando llegó al equipo de Vila Belmiro, mucha gente pensó que alguien de las oficinas del club le decidió darle la dorsal 10, el número que por tanto tiempo usó El Rey en la institución, y que tienen tintes sagrados por todo lo que hizo con él.
Pero no fue así. Con su pequeño tamaño, Yeferson Soteldo le hizo una exigencia al equipo cuando llegó en 2019. “Quiero usar el 10”. Al principio se pensó que era una broma, quizás una fanfarronada del joven venezolano. Pero no era así. Él usaba desear ese número, aunque sabía lo que significaba para el club.
“¡Pedí la 10!”, aseguró Yeferson Soteldo, actual figura del Santos, en una entrevista concedida para FIFA.com. “Lo primero que hice al llegar fue preguntar si estaba disponible. Sé bien lo que significa, pero jamás me pesó. Es más, el día de la presentación me dieron la camiseta sin número. Le recordé al presidente que quería la 10. ¡Pensó que bromeaba! Lo imprimieron, y cuando la di vuelta frente a la gente, explotó el estadio”.
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Causa curiosidad que un jugador como él cause esa atracción en uno de los grandes equipos del fútbol suramericano. Yeferson Soteldo tiene un muy pequeño tamaño, y no solo para el fútbol, también para la ciudadanía general: mide 1.58 metros. Además proviene de Venezuela que, si bien es una nación que ha progresado mucho en las canchas en los últimos 20 años, todavía no tiene una rica cultura futbolera. Eso hace de Soteldo un jugador especial.
Yeferson Soteldo llegó al Santos en 2019, luego de jugar con la Universidad de Chile y Huachipato. En Venezuela comenzó con el Zamora, un equipo de Barinas que, al igual que su natal Portuguesa, queda en la región llanera del país. Si bien mostró mucho talento en Venezuela y Chile, en Brasil ha explotado. Se ha convertido en un atacante vital para el Santos, y lo demostró recientemente al meter al equipo a la Copa Libertadores 2021 con un golazo contra el Deportivo Lara.
Cuando se habla de un jugador como Yeferson Soteldo, que tiene un tamaño que supera por ocho centímetros el metro y medio, hay muchas curiosidades. Una es la admiración que siente por el argentino Lionel Messi. Siempre ha visto al capitán de la Albiceleste y el Barcelona como un ejemplo a seguir. Leo es para Soteldo un “si él pudo, yo también”.
“Cuando estaba niño lo veía y decía, ‘si uno de los mejores del mundo llegó, ¿por qué yo no?’ Además, teníamos estilos similares”, se confesó Yeferson Soteldo, quien jugó la final de la Copa Libertadores 2020 con el Santos. “Sentía que, quizás, no iba a ser el mejor, pero al menos podía superarme como él. A mi primer hijo, que tuve a los 18, le puse Thiago Mateo por Messi”.
El fútbol le enseñó el buen camino
Como ocurre en muchas zonas de Venezuela, en El Muertico en Acarigua, Yeferson Soteldo convivió con dos caminos: el de la buena vida y el del peligro. Él mismo reconoce que tuvo cercanos que no andaban por buenos pasos y de eso se dio cuenta bastante temprano. “Crecí con unos amigos, gente a la que llamaba amigos en ese momento, que a los 12 años ya robaban”, recordó. “Los veía con muchas cosas y yo sin nada y me fui por ahí. Pero a los 13 uno perdió la vida y me dije: ¿Qué hago yo acá’”.
Pronto el fútbol guió a Yeferson Soteldo por los buenos caminos, hasta su llegada al Santos. “Un día surgió la posibilidad de jugar un partido al que asistiría una persona del Caracas FC. Se me rompieron los tacos y decidí no ir. El día del partido iban perdiendo 2-0. Me fueron a buscar y me prestaron unos zapatos”, rememoró el jugador. “Le dimos la vuelta al partido con goles y una asistencia mía. Ahí surgió la posibilidad de irme”.
Comentarios por su tamaño
Cuando llegó al Caracas FC, uno de los clubes más importantes de Venezuela, el tamaño de Yeferson Soteldo se convirtió en un problema. Era más pequeño que el 1.58 metros que tiene actualmente. Fue desahuciado y tuvo que regresar a su pueblo en el interior del país. Pero no se iba a dar por vencido.
“Fui a una prueba en la que estuve bien, pero un señor me dijo que no quedaba por mi físico, y que me olvidara del fútbol. Si eres un niño débil de mente, quizás abandonas, y casi lo hago. Pero no era débil, y entendí que no debía llevarme por esas palabras”, dijo Yeferson Soteldo. “Entonces fui a un torneo estadal en Barinas, al que asistió ‘Chita’ Sanvicente, que justo agarraba el Zamora. Estaba por cumplir 15 años, me vio y el resto es historia”.
Las enseñanzas de Sampaoli
Cuando Yeferson Soteldo llegó al Santos fue recibido por el entrenador argentino Jorge Sampaoli. Fue un pedido del entrenador que veía en el venezolano algo especial. Pero algo ocurrió poco después. El estratega, de acuerdo con el trabajo de FIFA.com, le dijo: “Conmigo no juegas hasta que aprendas a defender”.
“Debuté al poco tiempo, hice un gol. A los tres o cuatro partidos empezó a no citarme. Antes del clásico con Palmeiras, me llama y me dice eso, y ahí entendí qué pasaba”, contó Yeferson Soteldo. “Como oigo a mis entrenadores, trabajé y cambié. Ahora puedo recorrer 10 u 11 kilómetros por partido. Es uno de los técnicos que, hasta ahora, más me enseñaron”.
Su familia y el futuro
Con 23 años y siendo una estrella con el Santos en Brasil, uno de los países más futboleros del mundo, Yeferson Soteldo puede estar tranquilo, pero no. Quiere más, tanto para él como para su familia y sus tres hijos Thiago Mateo (5 años), Rihana (3) y Oliver (2). Es un fanático de jugar en los E-Sports. “Me gusta el Fornite, y en la pandemia practiqué mucho. Ahí me decidí a crear mi propio equipo. Yo juego por diversión, pero mis jugadores son profesionales.
Y… ¿Qué viene ahora? ¿Quizás dar el brinco a Europa? “Hoy puedo decir que estoy preparado para dar otro salto, aunque me siento bien en Santos”, dijo. “Después de la Copa América se verá. Siempre me gustó la liga inglesa”.
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