Parece que los conflictos familiares abundan en todas las familias, incluso en la realeza algunas situaciones pueden llegar a incomodar a sus miembros hasta quedar en una encrucijada.
Este sería el caso que estarían enfrentando los duques de Sussex, Meghan Markle y el príncipe Harry, quienes luego de su boda en mayo de 2018 comenzaron a vivir en una cabaña en el Palacio de Kensington y que estarían buscando mudarse tras conocerse el embarazo de Meghan.
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La pareja real estaría pretendiendo dejar su casa llamada Nottingham House, para irse a un lugar más amplio ahora que la familia crecerá con el hijo que esperan Harry y Meghan.
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Ambos estarían buscando vivir en un lujoso y espacioso apartamento junto al lugar donde viven Kate Middleton, el príncipe William y sus pequeños hijos los príncipes George, Charlotte y Louis, de acuerdo con medios británicos.
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Sin embargo, se han encontrado con una piedra en el zapato que habría desencadenado un conflicto familiar, la razón sería que el inmueble deseado por los duques de Sussex está habitado por los duques de Gloucester; un primo de la reina y su esposa, quienes se estarían negando a dejar el lugar en donde han vivido por mucho tiempo.
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Según Daily Mail, sería la duquesa Brigitte quien estaría poniendo resistencia. “Ella no quiere irse, ¿por qué debería? A ellos les dio ese apartamento su majestad la reina”, expresó una fuente a ese diario inglés.
Al parecer, sería esta situación la que estaría poniendo al príncipe Harry y a Meghan Markle a considerar la posibilidad de abandonar el palacio.
¿Crees que los duques de Sussex deberían irse a su propio lugar?
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