Dos nuevas especies de bagre sapo fueron descubiertas e identificadas por profesionales de la Universidad Nacional de Colombia en el área de influencia del Proyecto Hidroeléctrico Ituango en la cuenca Magdalena-Cauca. Las especies fueron nombradas científicamente como Pseudopimelodus magnus y Pseudopimelodus atricaudus.
A través del proyecto “Variabilidad genética de un banco de peces en los sectores medio y bajo del río Cauca”, adelantado por la Universidad Nacional de Colombia, en su sede Medellín, en convenio con Empresas Públicas de Medellín (EPM), se dio hallazgo a estas nuevas especies de bagre sapo, con las que además se desvirtúa la creencia de que estos individuos pertenecían a solo dos especies en Colombia. El estudio fue publicado en la revista PeerJ
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Apoyados en análisis moleculares y morfológicos, se describieron a Pseudopimelodus magnus y Pseudopimelodus atricaudus como dos nuevas especies de Pseudopimelodus Bleeker. También se diferenciaron de otras especies del género: P. bufonius de Guyana, P. schultzi del río Sinú, P. mangurus de Argentina y P. charus de Brasil.
En la primera fase del estudio se analizó la genética de los peces en el río Cauca antes de la construcción de Hidroituango, mientras que en la Fase 2 se analizaron las condiciones actuales, después de construida la presa. Inicialmente se analizaron 13 especies y ahora 18, entre las que se encuentra el llamado bagre sapo.
En un artículo reciente, los investigadores revelaron que en Colombia no hay dos especies de bagre sapo, sino cinco linajes evolutivos. Para ello, listaron los peces hallados en el área de influencia de Hidroituango desde el corregimiento Bolombolo, municipio de Venecia (Antioquia), hasta la desembocadura del Cauca al río Magdalena, cerca de Pinillos (Bolívar), tramo en el que hallaron las dos especies que no se habían descritas antes.
Tras ratificar que no habían sido previamente descritas, a una de estas nuevas especies de bagre sapo la llamaron Pseudopimelodus magnus, porque es la más grande de todo el género, incluso por encima de una de Brasil considerada como la de mayor tamaño hasta ahora.
A la otra especie de bagre sapo, que está en la parte baja del río Cauca porque no puede remontar de manera natural el sector encañonado de fuertes raudales, la llamaron Pseudopimelodus atricaudus, del latín ater, que significa oscuro o negro; y cauda, relativo a cola. La gente puede diferenciarlo, porque tiene una cola negra, mientras el P. magnus no la tiene, por lo que su nombre común sería “bagre-sapo cola negra”.
La especie de bagre sapo P. magnus tiene 43-44 vértebras, espina dorsal con aserraciones en su margen anterior. Por su parte, P. atricaudus tiene 39 vértebras, espina de la aleta dorsal lisa en su margen anterior y una banda vertical oscura que cubre 3/4 de la aleta caudal con base de radios y punta de los lóbulos de la aleta caudal hialina.
“La descripción de las dos nuevas especies de bagre sapo no solo ayuda a entender esa diversidad escondida de peces en Colombia, sino que permite priorizar medidas para su manejo”, indicó la profesora Edna Judith Márquez, líder de las investigaciones.
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