La Copa Libertadores se acerca más y más, pero el club argentino Boca Juniors tiene otras cosas en que pensar: más de la mitad de la plantilla del equipo tiene COVID-19. De acuerdo con reportes, hasta este jueves, 18 jugadores de la institución habían dado positivo al nuevo coronavirus.
No se conocen todos los nombres de los jugadores contagiados en Boca. Se sabe, según The Associated Press, que entre los afectados están Esteban Andrada, Carlos Izquierdoz, Lisandro López, Pol Fernández, Eduardo Salvio, Franco Soldado, Sebastián Pérez, Javier García, Agustín Rossi y Manuel Roffo.
El departamento de comunicaciones de Boca Juniors se encargó de dar más detalles del fuerte brote de COVID-19 que hay en el club. “Se detectaron positivos cuatro casos sintomáticos leves, seis con síntomas leves que en las últimas horas se encuentran asintomáticos, y ocho asintomáticos”.
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De acuerdo con el comunicado publicado por Boca Juniors, los jugadores contagiados “seguirán bajo estrictas normas sanitarias de aislamiento como indican los protocolos”. Los afectados volverán a ser sometidos a estudios de forma previa a su integración a los entrenamientos. Iván Marcone, el primero de los futbolistas que dio positivo tras comenzar las prácticas, se ha recuperado y pasará por test antes de unirse al resto de sus compañeros.
El brote de COVID-19 en Boca Juniors también ha afectado a parte del cuerpo técnico. Ya el equipo médico del club trata de encontrar la evidente falla en las medidas sanitarias del cuadro xeneize.
“Nos tocó. Algo se habrá hecho mal, pero nadie me puede explicar por qué un jugador tiene síntomas 30 horas después de un hisopado negativo”, dijo Rubén Argemi, médico del equipo, luego de salir del paso a cuestionamientos sobre medidas sanitarias inadecuadas en los entrenamientos, algo que pudo haber disparado la cantidad de jugadores contagiados en Boca Juniors.
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